La ministra de Sanidad y Consumo, Elena Salgado, ha anunciado que el Gobierno pretende prohibir fumar en los centros de trabajo antes de que acabe 2005. Para ello, comenzará a negociar con las organizaciones sindicales y la patronal para alcanzar un gran acuerdo en este sentido.

Salgado, que participó recientemente en Luxemburgo en el Consejo de ministros de Sanidad de la UE, dijo que está "revitalizando" las conversaciones con los agentes sociales y confió en que en el mes de octubre se habrá llegado a un acuerdo al respeto, y se habrán hecho "las mínimas inversiones necesarias" para que los espacios destinados a los fumadores en los centros laborales "estén efectivamente separados del resto y no contaminen el aire que respiran las personas que no desean fumar".

Por el momento, las sedes institucionales del Ministerio de Sanidad servirán de ejemplo ya que serán las primeras en las que se establecerá la prohibición. De hecho, Salgado ha iniciado ya las conversaciones con los sindicatos para establecer las zonas de fumadores en la sede ministerial.

Así, la decisión de la ministra ha sido aplaudida por el Comité Nacional para la Prevención del Tabaquismo. Rodrigo Córdoba, presidente de esta organización, ha defendido la efectividad de esta medida ya que, según afirma, en los centros de trabajo donde se prohibe fumar la productividad aumenta en un 3 % al disminuir el número de bajas médicas de sus trabajadores.

El doctor Córdoba cree que tras los recelos mostrados por patronal y sindicatos ante esta medida se esconden "actitudes personales", que van en contra de la evidencia científica sobre la acción cancerígena del humo del tabaco y del sentimiento de la mayoría de los españoles.

FINANCIACIÓN DE MEDICAMENTOS

Igualmente, Córdoba ha recordado que esta medida ya formaba parte del Plan Nacional contra el Tabaquismo, y lamenta que otras dos de las actuaciones esenciales contenidas en él, como son la financiación de tratamientos de deshabituación y el aumento del precio del tabaco, no hayan sido ratificadas por la ministra.

El presidente del comité considera que es ilógico que no se financien los tratamientos para dejar de fumar, que son efectivos y duran unos 2 ó 3 meses, cuando sí se costean otros menos eficaces y que son para toda la vida.

Respecto al incremento del precio del tabaco, el doctor Córdoba ha afirmado que el comité que preside se está planteando iniciar contactos con los responsables del Ministerio de Economía y Hacienda, ya que la subida depende de ellos y "es necesario ir concienciándoles de la efectividad de la medida, ya que por cada incremento del 10% en el precio se consigue una reducción del 7% en el consumo, especialmente en gente joven".

MEDIDAS URGENTES

Por su lado, los neumólogos piden que las zonas libres de humo se pongan en marcha "de forma urgente, desde hoy" y no esperar a 2005.

Según el jefe de Servicio de Neumología del hospital "12 de Octubre" de Madrid, el doctor Pedro Martín Escribano, "los efectos del tabaco de hoy se verán dentro de quince o veinte años", por ello, "la Administración Pública tiene que tomar medidas urgentes para reducir el tabaquismo entre la población, una enfermedad que mata cada año a unas 55.000 personas en España, la mitad del estadio Santiago Bernabéu".

Además de esas 55.000 personas, añade el jefe del Servicio de Neumología del hospital "La Princesa" de Madrid, el doctor Julio Ancochea, hay otras muchas que conviven con los efectos que el tabaco causa sobre la salud y que originan gastos directos, indirectos e intangibles, tanto al sistema sanitario como a sus familias. Por eso, continuó, combatir el tabaquismo ha de ser "una de las prioridades del Sistema Nacional de Salud".

Finalmente, el presidente de la Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica (SEPAR), José Luis Álvarez-Sala, ha pedido a la Administración que cuente con los neumólogos a la hora de abordar asuntos como el del tabaquismo y aseguró que una buena medida sería aumentar el precio del tabaco, que reduciría, sin duda, el número de fumadores.

Álvarez-Sala volvió a pedir al Gobierno que desarrolle las medidas del Plan Nacional contra el Tabaquismo, aprobado por el Ejecutivo anterior en enero de 2003.